Día 1

 Las cosas de palacio, van despacio, o eso dicen.

¿Nunca te ha pasado que la motivación hacia algo (o alguien) te hace lanzarte al vacío en un tiempo récord?

Si la respuesta es si, estás tan jodida como yo. Lo siento, soy clara. Batir en tiempo récord, aquello que necesita su tiempo, es cagarla muy de lleno. Por eso, y más aún, si no es tu primera experiencia en "batir récords a contratiempo", para y piensa.

"Cada cosa a su tiempo", si eres de impulsos, seguro que te habrán y habrás repetido esta frase mil y siete veces. Pues si cariño, no te precipites, no caigas en el juego del ahora o nunca. Para y piensa, no cometas la misma cagada de nuevo, ya sabes qué suele pasar cuando lo haces. Lloras, te quejas, corazón roto y alma herida. 

Deja eso de lado, la solución la tienes tú. Para y piensa. Mira qué pasos seguir en dirección a qué o quién quieres. Valora si esos pasos que vas a dar, compensan hacia aquello a por lo que vas.

Y tú, ¿paras y piensas o te lanzas a ver qué pasa?

¡Te leo!